a defenestración de Yasna Provoste por el Senado nacional me ha recordado un dicho que viene siendo usado desde la antigüedad:
"El mayor castigo para quienes no se interesan por la política es que serán gobernados por personas que sí se interesan".
Blog de Manuel Barrera Romero dedicado al análisis y la reflexión de temas políticos, sociales y culturales contemporáneos, con algún énfasis en la situación chilena.
Los problemas del país son conocidos. Un gobierno de cuatro años no puede resolverlos todos, pero puede avanzar en los de mayor importancia. A continuación se propone un marco dentro del cual ellos se pueden organizar. Algunos de estos problemas han quedado pendientes total o parcialmente después de cuatro gobiernos de
Esta propuesta del autor surge de su trabajo “Hacia un nuevo pacto político y social”, publicado en este blog
I.- La construcción de un Estado democrático sólido y eficiente, y de una sociedad civil participativa.
II.- Cómo avanzar en la ampliación del empleo y de la protección social.
III.- Bases para la constitución de una economía y una sociedad del conocimiento.
IV.- Modernización industrial y desarrollo tecnológico.
VI.- La modernización y el cambio cultural
VII. La vida en la ciudad.
VIII.- Hacia un nuevo pacto político y social: reformulación de
Los ideales fundamentales son los de siempre: avances decisivos en el proceso de democratización; construcción de una sociedad más equitativa e igualitaria en lo económico, social y espacial; participación popular en la vida ciudadana; énfasis en el apoyo a las medianas, pequeñas y microempresas. Amplia extensión del empleo formal y lucha frontal contra la pobreza y la exclusión. Permanente compromiso con un desarrollo que respete al medio ambiente. Mayor solidaridad social, mejor educación para todos, prioridad para la salud física y mental de la población, más seguridad pública. En suma, una sociedad más sana, solidaria, optimista y feliz.
(Ver "Hacia un nuevo pacto político y social". Haga click más abajo en "Entradas antiguas")
a Para adelantar en Chile en el proceso de modernización del Estado, de la sociedad y de la vida cultural, que en muchos aspectos tuvo un fuerte retroceso durante el gobierno militar, es necesario avanzar persistentemente en la laicidad tanto del Estado como de la vida social, a fin de terminar con la confusión religión/política. Sin ello seguiremos siendo una de las sociedades más conservadoras de la región y correremos el riesgo de ser comparados con culturas fundamentalistas ajenas a la tradición democrática y racionalista del mundo occidental. Una de las últimas leyes dejadas como herencia de la dictadura a la democracia fue la prohibición del aborto terapéutico. Y esa prohibición aún está vigente. “Prácticamente todos los países de América tienen leyes sobre el aborto terapéutico que datan, algunas, del año
Lo anterior se ve reflejado claramente en la mentalidad de muchos políticos. Actúan en la vida pública, al interior de las instituciones políticas del Estado, de acuerdo a sus convicciones religiosas en desmedro de la realidad social, que a veces significa vidas humanas en peligro o situaciones sociales altamente riesgosas para grandes sectores de población. No siempre distinguen sus creencias de las políticas del Estado ni aun los parlamentarios, que deben legislar para el total de la comunidad nacional. El reciente fallo del Tribunal Constitucional (adelantado en una declaración oficial de dicho organismo), requerido por parlamentarios conservadores, que prohibe la distribución gratuita de la píldora del día después por los organismo de salud del Estado, pero no su venta en farmacias, constituye no sólo una vergüenza para la conciencia nacional sino una fuerte agresión a las personas más pobres de la población.
Desgraciadamente, este fallo troglodita fue aprobado con el voto de un ex-Ministro y ex- embajador de un gobierno de la Concertación, el Sr. Mario Fernández. Ello significa que el conservadurismo valorativo penetra a un amplio arco del espectro político. Cambiar esta situación es una importante tarea de la cultura progresista nacional.
La implementación de este triunfo del conservadurismo valorativo traerá más abortos clandestinos y, por consiguiente, más muertes de mujeres jóvenes en nuestro país.